Las costumbres sexuales más morbosas de Japón

Aunque en este país este prohibido pagar por sexo con penetración, el sexo es una de las industrias que más dinero mueve en este país, aproximadamente 20.000 millones de euros al año.

Ya sea con servicios con otras personas o en productos para disfrutar en solitario como revistas, vídeos o DVD porno, o la propia pornografía de internet, el sexo está presente en la vida de la mayoría de los japoneses.

A continuación os dejamos alguna de las prácticas sexuales más curiosas de la cultura japonesa para que las conozcas o quieres probar cosas nuevas con tu pareja:

Burusera: Así es como se denominan a las chicas o tiendas que venden bragas usadas. Las chicas que llevan las bragas puestas hasta que la otra persona las compra se denomina Namasera. En estas tiendas también se venden otros tipos de ropa como uniformes, chaquetas, y trajes de baño escolares, todo ello siempre acompañado de una fotografía de la chica a la que pertenecía llevando puesta la prenda. El precio de unas bragas usadas puede rondar entre los 30 y 70 euros.

Imekura: Se trata de lugares especializados en una imagen de la mujer concreta como colegialas, enfermeras, policías, azafatas… Existen algunos clubes de este tipo que están especializados en exhibicionismo, por lo que el cliente puede contratar a una chica para que le acompañe por ejemplo en un viaje en metro y practicar sexo en el andén o en el vagón.

Kokigami: Este término da nombre a un tradicional juego donde se disfraza al pene con telas de colores o papel. Koki es el nombre que tienen los pañuelos que llevan los actores japoneses, y gami es simplemente papel, de ahí su nombre. Tras disfrazar el pene, envolviéndolo como un regalo se le debe ofrecer a la persona amada. Habría que ver la cara que se le queda a la pareja ante semejante sorpresa.

Love Hotels: Se trata de hoteles que ofrecen alquilar sus habitaciones durante horas, las cuales están totalmente equipadas y pueden ser hasta de diferentes temáticas, para que puedan practicar sexo.

Pink Salons: Se trata de locales especializados en sexo oral, los cuales están causando furor actualmente debido a sus bajos precios. En ellos no existe apenas iluminación, y el cliente se sienta en una butaca a la cual acudirá una de las empleadas para realizarle una felación. Dependiendo de lo que el cliente haya pagado para estos servicios, disfrutará de una cantidad diferentes de felaciones por diferentes chicas.

Pantsu Getta: Se trata de un juego en el que una mujer esconde su ropa interior en un determinado lugar y lo anuncia en un foro. Todas las personas que estén interesadas lo buscaran por la calle y podrán pedir pistas a la chica que las ha dejado a través del foro. Cuando el ganador encuentre el premio, debe comentarlo en la web dando todos los detalles sobre él.