Descubriendo la vida de una escort en España

¿Cómo es la vida de una escort de lujo?

La mayoría de nosotros sabemos que servicios ofrecen las mujeres escort. Sin embargo, ¿te has preguntado alguna vez cómo es la rutina de estas profesionales del sexo? Hoy, te proponemos conocer cómo es la rutina diaria de estas damas de compañía. ¡Acompañanos en este viaje en el que profundizaremos sobre la vida y los secretos que esconde esta profesión!

La rutina de una mujer escort

Mientras la mayoría de las personas se ponen una camisa y un pantalón antes de salir a toda prisa a la oficina, las escorts llevan su rutina matutina un paso más allá. La imagen que ellas proyectan no puede limitarse a verse presentables. Tienen que mostrar un aspecto impecable, pero también seductor e irresistible. ¡Que al caminar por la calle la gente se de media vuelta atónita al verlas! Obviamente, esto significa que las escort dedican mucho tiempo a cuidar de su apariencia. Por norma general, el proceso comienza cuidando su cabello de forma meticulosa. Luego se maquillan de forma elegante con lo mejor que hay en el mercado de la cosmética. Finalmente, terminan poniéndose vestidos o conjuntos que resultan irresistiblemente atractivos para los hombres. De hecho, las escorts visten atuendos de tal calidad que pareciera que cada día van a la celebración de una boda o a festejar el último día del año. Sin embargo, la preparación de estas profesionales del sexo no acaba aquí. Una mujer escort también ha de tener conocimientos sobre perfumería. Tiene que emplear una fragancia que transmita a los clientes sedición y elegancia al mismo tiempo.

La mayoría de las escort se caracterizan por ser mujeres que prestan gran atención a todo este tipo de detalles. Para ellas, es fundamental verse guapas y sentirse bien consigo mismas. Algo similar a lo que podemos ver, por ejemplo, con las modelos que transmiten espectáculos en vivo en las cams porno. Es más, el trabajo de una escort también implica -como en el caso de las camgirls- conversar con los clientes a lo largo del día. No siempre sobre temas de sexualidad. Una escort es una mujer que trabaja por cuenta propia, lo que implica que la mayoría del día están ocupadas. Ellas no tienen una jornada de 8 horas como el común de los mortales. A veces puedes estar más de 12 horas reunidas con un cliente, atendiendo las llamadas de otros o afianzando su relación con los más antiguos. Por otro lado, estas conversaciones no se limitan a concertar la fecha, la hora y el lugar de una cita con un cliente. Más bien es la oportunidad que ellas tienen para conocer realmente a sus clientes: su personalidad, sus deseos, sus inclinaciones sexuales...

Como sucede con las modelos de chats porno, las escort dedican gran parte de su tiempo a conocer las preferencias sexuales de sus usuarios, así como el tipo de servicio que esperan de ellas. De esta manera, ellas saben qué imagen proyectar y qué decir en cada momento antes siquiera de estar frente a su cliente. Obviamente, esto implica que para ser una verdadera escort de lujo hay que ser una persona sociable, abierta, alegre y extrovertida. También se necesita tener una gran capacidad de memorización, ya que es imprescindible recordar todo sobre los clientes antes de conocerlos en persona. El momento culminé de estas profesionales del sexo es cuando se encuentran cara a cara con sus clientes. Es un momento en el cual la intimidad y la conexión personal entre ellas y los usuarios debe desafiar todo lo ordinario. En este instante las escorts toman diferentes papeles a la vez. Hacen de mujer, novia, acompañante, amiga, confidente sexual... Una mujer hermosa e inteligente en la que pueden confiar y que les transmite seguridad y comodidad. Chicas que escuchan atentamente los pensamientos y los deseos de sus clientes, tanto si tienen o no que ver con el sexo. Por supuesto, todos los acontecimientos que ocurran mientras están con los usuarios fue previamente consensuado. Siempre se establecen unos límites entre lo que una escort está y no dispuesta a hacer con su cliente.

Conforme la jornada de una escort llega a su fin, es la hora de que esta mujer reflexione unos minutos sobre cómo fue su día con el o los clientes. Las escorts emplean el final de su jornada laboral para pensar cómo fueron sus relaciones con los usuarios. ¿Qué me ha transmitido esta persona? ¿Hemos conectado bien desde un punto de vista emocional? ¿Nos hemos sentido felices el uno con el otro? ¿De verdad le he ofrecido el servicio que él deseaba? ¿Hay algo que pueda mejorar? Estas son algunas de las cuestiones que pasan por la mente de una escort al finalizar el día. Lo habitual es que las relaciones de una escort con un cliente duren poco tiempo (horas o días). Sin embargo, a veces una escort puede tener una relación con un cliente durante años, como ocurre con algunas camgirls en las cams porno. Por ello, ellas tratan de dar lo mejor de sí para sentirse totalmente realizadas y, sobre todo, para dar un mejor servicio la próxima vez.

Definitivamente, la rutina de una escort es muy diferente a la de una persona corriente, pero también a la de una prostituta. Ellas no se limitan a cumplir los deseos sexuales de los usuarios. También aprender cómo es su personalidad, los acompañan a eventos, los apoyan psicologicamente, les muestran afecto... ¡Durante horas, días o años! Una profesión que guarda cierto parentesco con la de las modelos de chats porno. Aunque en este caso sí hay contacto físico.

Consejos para planificar una cita con una escort

-Elige una escort procedente de una agencia de renombre (para evitar decepciones o estafas).

-Comparte con una persona de confianza la ubicación donde vas a estar con la escort (por seguridad).

-Escoge un lugar apartado para tu cita con la escort (por intimidad).

-No hagas demasiadas preguntas personales (para evitar incomodidades).

-Sé educado con ellas (la relación será mejor entre ambos y el servicio también).

-No tomes demasiado alcohol (para no tener que arrepentirte).